Siempre escuchamos que la inteligencia emocional debe ser una de las características de un empresario. Pero, ¿qué significa tenerla y cómo te puede ayudar en los negocios? Aunque para algunos pueda ser un completo misterio, los coaches manejan bien este tema y por eso te explicaremos sus ventajas.

Características de un empresario con inteligencia emocional

La inteligencia emocional es un conjunto de ideas relativamente nuevas que busca el manejo adecuado de las emociones. Esto también implica el reconocimiento de tus sentimientos y capacidades, al igual que las de los demás. Más de allá de tu IQ, este conocimiento te permitirá evolucionar con la exigencia de tu empresa.

Siendo un emprendedor o empresario, el desarrollo de esta herramienta empieza por:

  • Tener mayor autoconciencia. Expertos en coaching y otros ámbitos concuerdan que esta es la base para adquirir inteligencia emocional, porque te permite expresar tus sentimientos sabiendo cómo pueden afectar a los que te rodean. Este factor es decisivo para contar con equipos motivados y de gran desempeño.

 

  • Fomentar el autocontrol. Del punto anterior surge la necesidad de controlar las emociones negativas que alteran el buen clima laboral. Como gerente o jefe, debes evitar que el enojo, frustración, orgullo o soberbia tomen las decisiones. Estos comportamientos solo crean confusión, evitan la ejecución concreta y agreden tanto al personal como a clientes.

 

  • Mejorar tus habilidades comunicativas. La comunicación asertiva debe ser una prioridad si quieres ser un emprendedor exitoso. Esto también significa desarrollar la escucha activa para entender mejor cómo piensa tu personal y qué necesita tu cliente. Más que hablar con claridad, necesitas hacer sentir que los demás son escuchados para ganarte su confianza.

 

  • Inculcar más la autoconfianza. Entre las características fundamentales de un empresario, no puede faltar esa sensación de control sobre su destino. Esto empieza por transmitir a tus colaboradores y audiencias la certeza de que tus productos o servicios tendrán la aceptación deseada. Además, tu evolución depende de aprender a delegar y darle confianza a tu personal.

 

  • Preocuparse por las personas. Un líder no termina de convencer a su gente hasta que muestres interés sincero por el bienestar de los demás. Para ello debes atender tus sentimientos y analizar las situaciones desde diferentes enfoques. Cuando te preocupas de forma genuina, establecer relaciones sólidas basadas en el respeto y la gente está más inclinada a seguirte.

 

  • Pasar de la intención a la acción. En un liderazgo efectivo, la intención debe manifestarse claramente ante todos lo que intervienen en el proceso. Si tienes metas y objetivos claros que transforman en acciones competentes, los demás también asumirán el compromiso que estás demostrando.

 

  • No dejar de aprender. Parte fundamental de la inteligencia emocional consiste en aprovechar cualquier herramienta para seguir creciendo. Esto puede ser coaching, feedback positivo, desarrollo de habilidades y todo lo que te permita potenciarte como persona o como líder.

Saber aplicar la inteligencia emocional sirve para mejorar tu liderazgo, tener una visión diferente sobre oportunidades y contribuir al bienestar de tus colaboradores. Para ello, puedes apoyarte en las asesorías que ofrecemos en ActionCOACH, contáctanos.